25 de julio de 1567, después de largos años de resistencia de los
pueblos originarios, el conquistador Diego de Losada dio por fundada
Santiago de León de Caracas.
No fue nada fácil para el invasor español establecerse en el valle de
los caracas, donde habitaba un pueblo aguerrido, lleno de profundo amor
por su país. Sólo después de sangrientas batallas como la del río San
Pedro (Caracas), librada en los barrancos del riachuelo con nacimiento
en San Pedro de Los Altos (Miranda), y la batalla de Maracapana, dada en
un lugar cerca de donde hoy se encuentra la plaza de Catia (Caracas),
pudo el español Diego de Losada llevar a cabo la denominada fundación de
Santiago de León de Caracas, el año de 1567.
El gran cacique Guaicaipuro encabezó las luchas de los pueblos
originarios. Su prestigio como guerrero abarcaba todo el extenso
territorio desde las alturas de Los Teques hasta Filas de Mariche
(Miranda) y por el norte con Macuto y Carayaca (Vargas). Las primeras
hazañas del gran guerrero fueron conocidas por los españoles cuando el
gobernador Pablo Collado envió al capitán Pedro de Miranda a explotar
las minas de oro donde habitaba el pueblo de los teques. Guaicaipuro se
hizo presente con sus guerreros y el conquistador abandonó la región.
En
1564, Diego de Losada, con mayor refuerzo de soldados, se adentró en
las tierras de los caracas dispuesto a establecer fundaciones y
repartimientos entre los españoles. Guaicaipuro se enfrenta en las
riberas del río San Pedro, en la llamada por el historiador José de
Oviedo y Baños, batalla de San Pedro. Diego de Losada usó esta vez
perros amaestrados y caballos con corazas y logró vencer a los guerreros
de Guaicaipuro. Entendiendo que se enfrentaba a un enemigo mejor
preparado, Guaicaipuro hizo una alianza con otros caciques, entre ellos
Araguaire, Araupuro, Baruta, Catia, Chacao, Guaicamacuto, Cuarauguta,
Mamacuri, Naiquatá, Querequemare, Usipara y Poropocunate. Juntos
formaban un ejército de más de cinco mil guerreros. Guaicaipuro llevó a
esta junta a mil guerreros de su pueblo, los teques.
Marchaban a la
vanguardia, acompañados por Paramaconi, Urimare y Paramacay, cuando
fueron emboscados por Alonso Galeas y la sorpresa provocó la desbandada
de los guerreros. No se rindió Guaicaipuro y rehizo a buena parte de su
tropa y con ella buscó combate a los españoles en la entrada de Catia.
Esta batalla se llamó de Maracapana, y los españoles hicieron retroceder
a Guaicaipuro. Después de estas dos sangrientas batallas, los españoles
decidieron eliminar a Guaicaipuro para conquistar el valle de los
caracas.