Es famoso por sus novelas de ciencia ficción y es considerado junto a Julio Verne uno de los precursores de este género. Por sus escritos relacionados con la ciencia,en 1970 se decidió en su honor llamar H. G. Wells a un satélite lunar ubicado en el lado oscuro de la Luna.
H. G. Wells fue toda su vida un izquierdista convencido. De hecho, su primera novela, La máquina del tiempo (1895), trataba fundamentalmente de la lucha de clases. Su convicción acerca de la necesidad de un sistema social más justo, lo llevó a militar en la Sociedad Fabiana, cuyo objetivo era instaurar el socialismo de forma pacífica.
Wells estaba convencido de que la especie humana podría ser mejorada gracias a la ciencia y a la educación. Sin embargo, no cayó en la ingenuidad de muchos de sus contemporáneos y fue uno de los primeros pensadores que advirtió el peligro de confiar ciegamente en las máquinas. Siempre postuló que es el hombre quien debe dominar a las máquinas, y no al revés.
Durante la última época de su vida, Wells asumió la tarea de defender en escritos y conferencias todo aquello que considerara positivo para el progreso, así como en criticar los grandes conflictos bélicos que asolaron Europa.
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